Al Gobierno no le interesa combatir la inseguridad porque eso le permite fomentar un Estado fascista: Ernesto Pazmiño

Para Pazmiño, la política que tiene el Gobierno es para favorecer a los negocios de los grandes grupos económicos y destruir al pobre.

Ernesto Pazmiño, abogado y exdirector de Rehabilitación Social, destacó que un banquero como Guillermo Lasso, en la Presidencia de la República, jamás combatirá eficientemente el narcotráfico y la inseguridad porque los grupos irregulares están enquistados en el mismo régimen, como se evidenció en el informe del caso León de Troya.

“Ahí están las pruebas suficientes, tenemos la muerte de (Rubén) Cherres y no pasa nada. Danilo Carrera salió en menos de siete horas de su retención policial y está vinculado con las bandas de narcotráfico. ¿Dónde están los jueces y fiscal? No pasa nada”.

Ernesto Pazmiño señaló que a la derecha y la banca no les conviene combatir al narcotráfico porque el gran dinero que se deposita en las Instituciones financieras provienen del negocio de la droga y por eso les resulta lucrativo.

“En Ecuador se lavan miles de millones anualmente. El lavado de activos en el Ecuador lo conocen todos, menos la Policía y Fiscalía”.

Además subrayó que la violencia le sirve al Gobierno para promover un Estado fascista, pues le permite entregar más dinero a las Fuerzas Armadas e incorporar más Policías, mismos que no protegen al pueblo sino a una minoría opulenta y sus grandes fortunas.

“El objetivo es político, pues buscan que la ciudadanía crea que existe un Gobierno que pone límites a la inseguridad, para que se sumen a estas propuestas”

Resaltó que si en verdad se quisiera combatir la inseguridad, el régimen impulsaría una política social, pero en realidad se ha retirado al Estado, para que así las organizaciones criminales lleguen a ocupar esos lugares, ofreciendo agua potable en tanqueros o con dispensario médico, para desde ahí reclutar a la juventud y prepararlos para sicarios.

“El gran problema es que en Ecuador hay ausencia de autoridad, no hay liderazgo en el país, no hay política criminal ni de seguridad”-

Criticó la propuesta de declarar como terroristas a los grupos delincuenciales, pues además se requiere de una reforma legal, no con un simple decreto. Además que esto le permitirá reprimir y violentar a los ciudadanos comunes o ejercer una persecución con el supuesto argumento de que son terroristas.

“En los próximos días según como vaya avanzando el escenario político veremos las protestas sociales, a las que también calificaran como acciones terroristas”.

Para Pazmiño, «la única política que tiene el Gobierno es para favorecer a los negocios de los grandes grupos económicos y destruir a los pobres, a quienes hay que matar», por ello, dijo, no son circunstanciales las masacres en las cárceles: “Es una política de la Policía que haya una limpieza entre ellos, la Policía no ha disparado un solo tiro, pero han muerto 700 personas”.

Aseveró que la misma Policía arma a los grupos delincuenciales, una vez a los Choneros, otra a los Tiguerones, otra a los Lobos y de esa manera se matan entre sí.